El llamado “Gran Cuerno de África” es una región situada en la parte oriental de África bañada por el Mar Rojo y el Océano Índico, que actualmente incluye Etiopía, Somalia, Eritrea, Djibouti, Sur Sudán, Kenia y Sudán. En este territorio, con muchas zonas semi-desérticas y secas, viven más de 200 millones de personas que se ven afectadas por una situación crónica de emergencia humanitaria y de inseguridad alimentaria debida a las condiciones climáticas adversas, la recurrencia de las crisis económicas y los conflictos armados y la violencia inter-comunitaria, y las graves consecuencias socio-económicas provocadas por la pandemia CoVid-19.
Emergencia alimentaria
La inseguridad alimentaria es una situación recurrente en la región, pero en los últimos años se ha recrudecido debido al impacto de múltiples y continuados shocks. En 2011, más de 12 millones de personas sufrieron la peor hambruna en décadas. En 2019, la sequía provocó que 11,7 millones de personas padecieran inseguridad alimentaria grave y más de 785.000 niños, una desnutrición severa en Etiopía, Somalia, Kenia y Uganda. En 2020, la inundación afectó directamente a 3,4 millones, y la invasión de langosta del desierto afectó a 10,25 millones de personas.
La irrupción de la pandemia Covid-19 supone un grave riesgo sanitario por la debilidad de los sistemas sanitarios en los países del Cuerno y las condiciones de hacinamiento de los campos de refugiados y desplazados internos, pero también y sobre todo un impacto socio-económico devastador en países donde el trabajo informal para obtener salarios diarios es lo más común.
Por último, la región ha sufrido un dramático incremento de conflictos armados, con la guerra en el estado norteño de Tigray en Etiopía, nuevos enfrentamientos en la región de Darfur en Sudán, y numerosos ataques inter-comunitarios en diversas regiones de Sudán del Sur, que inciden directamente en la seguridad alimentaria y en la capacidad de las familias para resistir las crisis.
Situación actual
Nuestra acción
Junto con otras Cáritas y con la contribución de la Agencia Española de Cooperación al Desarrollo, estamos apoyando la estrategia de seguridad alimentaria de Cáritas Sudán del Sur:
La capilaridad y legitimidad de la Iglesia hace posible el acceso de los agentes de Cáritas a zonas militarizadas y restringidas para otros actores donde miles de personas precisan de ayuda humanitaria urgente.